lunes, 25 de marzo de 2019

MIRAR A LOS OJOS A LA ULTIMA CANTARERA VIVA

Cómo te quedas cuando sabes que estás mirando a los ojos a la última cantarera viva, y sentir la emoción mutua, de alfarera a alfarera, cómo aguantas el tipo al ver la sobrecogedora entrega que abarca toda una vida, ver toda la producción apilada, una producción de años y años cocida en un horno árabe de leña, ver la montaña de barro en perfecto estado para seguir trabajando, para seguir produciendo cántaros, con esas manos y brazos incansables en un torno de pie, que ya fue de su madre.

Que la fuerza de las cantareras, las que ya no están, y la fuerza de la que todavía está, nos alimente, para seguir torneando y amasando el barro.

Alfareras, cantareras, ceramistas en todas sus vertientes, las de antes y las de ahora, que seáis reconocidas, que estéis presentes en mesas redondas, en toma de decisiones, en posicionamientos, en debates, que se cuente con vosotras para mostrar respeto, reconocimiento y honor, que vuestra historia sea contada, que ocupéis museos, galerías, estudios, documentales, libros, que no desaparezca vuestra sabiduría, que os tengamos como referente en cada jornada de trabajo en nuestros talleres, en cada escuela, en cada evento, en cada conversación, que seáis la inspiración y el aliento de seguir adelante para la siguiente generación.

Que la exigencia a lxs alfarerxs y ceramistas actuales, de adaptarse al S.XXI empiece por el reconocimiento total de vuestra presencia y os otorguemos la justa importancia a vosotras, mujeres sustentadoras de un oficio y de un legado cultural e identitario.

Patricia Varea Milan

Fotografia, ojo y lente para la labor de recuperar historia y memoria del complice Raul Perez.